Un estudio revela que las políticas agrícolas impulsadas por la Fundación Gates aumentaron un 30% el hambre en África, mientras agricultores denuncian endeudamiento y pérdida de soberanía alimentaria. Líderes africanos exigen reparaciones.
La «Revolución Verde» que agravó la crisis
La Alianza para una Revolución Verde en África (AGRA), iniciativa lanzada en 2006 por la Fundación Bill y Melinda Gates junto a la Fundación Rockefeller, prometió duplicar los ingresos de 30 millones de pequeños agricultores y reducir a la mitad el hambre en 20 países. Sin embargo, 14 años y más de mil millones de dólares después, los resultados son catastróficos:

- Un estudio de Timothy A. Wise de la Universidad de Tufts revela que el hambre severa aumentó un 30% en los 13 países prioritarios de AGRA desde 2018 .
- Los rendimientos de cultivos básicos como el maíz solo crecieron un 18%, muy lejos del 100% prometido, mientras cultivos tradicionales como el mijo y la yuca disminuyeron .
- Agricultores en Zambia, Etiopía y Kenia enfrentan deudas insostenibles por comprar semillas híbridas y fertilizantes químicos, cuyos precios se dispararon un 300% tras la guerra en Ucrania .
Deuda, cárcel y suelos «corruptos»
La estrategia de AGRA, centrada en monocultivos dependientes de insumos industriales, ha tenido efectos devastadores:
- Endeudamiento masivo: En Zambia, los agricultores gastan hasta el 80% de sus ingresos en fertilizantes y semillas, sin lograr cubrir costos. El gobierno acumula 106 millones de dólares en deudas por subsidios fallidos .
- Pérdida de biodiversidad: En Ruanda, la obsesión por el maíz (impulsada por la exministra y presidenta de AGRA, Agnes Kalibata) redujo cultivos nutritivos como el sorgo y la batata, aumentando la desnutrición .
- Criminalización de prácticas ancestrales: En Kenia, los agricultores pueden ser encarcelados por guardar o intercambiar semillas no autorizadas, una medida que beneficia a corporaciones como Bayer-Monsanto y Syngenta .
¿Quién gana con el modelo de Gates?
Mientras los pequeños agricultores sufren, las multinacionales cosechan beneficios:
- AGRA ha modificado leyes en países como Nigeria y Uganda para favorecer la venta de semillas patentadas y fertilizantes, con apoyo directo a ministerios de agricultura .
- El 66% del financiamiento de AGRA proviene de la Fundación Gates, que también invierte en empresas de biotecnología como Monsanto, generando conflictos de interés .
- Según Vandana Shiva, activista ambiental, las «semillas mágicas» de Gates son un «desastre ecológico» que destruye suelos y crea dependencia .
La resistencia africana y la demanda de reparaciones
En agosto de 2024, más de 150 líderes africanos de comunidades agrícolas, religiosas y ambientales firmaron una carta exigiendo reparaciones a la Fundación Gates por:
- Restaurar suelos y acuíferos contaminados por agroquímicos.
- Financiar alternativas agroecológicas basadas en conocimientos locales.
- Devolver la soberanía alimentaria a los agricultores, sin imposiciones corporativas .
Million Belay, de la Alianza por la Soberanía Alimentaria en África (AFSA), resume el sentir: «No necesitamos que Bill Gates nos diga cómo cultivar. Nuestras prácticas ancestrales pueden alimentar a África sin destruirla» .
Fuentes:
- Tufts University (2020). «False Promises: The Alliance for a Green Revolution in Africa» .
- Deutsche Welle (2020). ¿Fracasó la revolución verde de Bill Gates en África? .
- Alliance for Food Sovereignty in Africa (2024). Open Letter to the Gates Foundation .
- The Continent (2024). «Bill Gates plays God in Africa’s agriculture and gets it wrong» .
- Children’s Health Defense (2022). Las «semillas mágicas» de Bill Gates no resolverán el hambre .
Conclusión:
La «Revolución Verde» de Gates no solo no cumplió sus promesas, sino que profundizó la pobreza y la degradación ambiental en África. Mientras las corporaciones prosperan, los agricultores exigen un cambio radical hacia modelos sostenibles y libres de control externo.
¿Puede África recuperar su soberanía alimentaria? La respuesta está en sus tierras, sus semillas y su gente.
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